Remontada para empezar: Chargers vs Vikings

Phillip Rivers dijo después del partido que todo el mundo hubiera preferido ganar el partido sin retornos para TDs, con soltura y sin problemas, pero que esta clase de victorias son de las que fortalecen a un equipo. Veremos si es verdad, pero desde luego el 27 – 20 de ayer no fue apto para cardiacos.

Quién dijo que el partido iba a ser coser y cantar? Que los problemas con los equipos especiales estaban solucionados y que lo mejor de los Chargers es su ataque –esto último lo he dicho yo… y unas cuantas veces–? Ayer en el Qualcomm sólo quedó una cosa clara… que la pretemporada no sirve para nada más que para coger ritmo.

Hasta el día de ayer San Diego había dado la sensación de que en ataque Rivers y compañía estaban preparados para destrozar rivales y que, en defensa, Greg Manusky y sus chicos eran un mar de dudas. Nada más lejano de la realidad, o por lo menos en el día de ayer. Rivers jugó uno de sus peores partidos desde que es el QB titular de los San Diego Chargers, mientras que la defensa Bolt fue un auténtico muro de contención por tierra, mar y aire para los Vikings: a las estadísticas me remito… A. Peterson 98 yardas de carrera y D. McNabb 39 –sí 39!!–yardas de pase. Una pesadilla para los Vikes.

Ay querido Adrian tú no te sabes eso de que calladito se está más guapo. El mejor RB de la NFL, el sr. Peterson, no se le ocurrió mejor forma de empezar la semana que anunciando que iba a destrozar a SD por tierra con más de 200 yardas y que los Vikings iban a llevarse la victoria del Qualcomm. Lo segundo casi lo consiguen –gracias a nuestros fabulosos equipos especiales–, lo primero ni de cerca. Al finalizar el partido Takeo Spikes, reconocía que Greg Manusky les había mostrado el video a toda su defensa una y otra vez para que supieran como de serios se tomaba Peterson y compañía el reto de enfrentarse a la mejor defensa del año 2010. En nuestra casa va a ser que no querido Adrian!

Un año más tarde… mismos problemas

A pesar de la victoria, como decía Rivers ayer, el partido viene bien a San Diego para crecer como equipo por todos los problemas que surgieron en su transcurso y en donde volvieron a aparecer cantidad de errores estúpidos que al final te cuestan partidos.

La primera jugada del encuentro fue un mal chiste después de todo lo que se ha hablado durante la pretemporada de la necesidad de arreglar los equipos especiales. Kaeding abre el partido con un kickoff, Percy Harvin recoge la pelota en su end zone y empieza el festival de calamidades. Stuckey se pasa de frenada –primero que no para al WR de los Vikings– y Gamble falla en el tackle que debía detener el retorno…a partir de ahí camino libre. 7-0 después de 15 segundos de partido y Kaeding lesionado al intentar parar a Harvin. Lo dicho una broma demasiado pesada.

El jarro de agua fría en SD fue colosal, no hacía falta más que ver las caritas de los californianos. Pero tranquilos…siempre está súper Phillips para conseguir turnovers y meter a los Bolts en el envite. El primer pase de McNabb en su primer drive como Vinking acababa con una gran intercepción del OLB, que dejaba a San Diego a 6 yardas de la end zone. Pase de Rivers a Tolbert y TD del RB. 7-7 y toque de corneta de San Diego. A la carga!!!!

Pero, como en los Chargers nos mola el masoquismo y la emoción, había que conseguir que los Vikings se metieran de nuevo en el partido. Ni un solo punto por parte de San Diego en todo el segundo cuarto, en gran parte debido a la inoportuna lesión de nuestro kicker, Nate Kaeding, y la poca fe de Norv Turner en nuestro punter a la hora de chutar entre palos, dejaba a San Diego a 10 puntos de distancia de los Vikings antes de acabar la primera parte.

El Qualcomm era un cementerio y el recuerdo de los continuos slow starts pasaba por la mente de todos los aficionados de los Chargers.

Fantástica segunda parte

Nada tuvo que ver la primera parte con lo que vimos a continuación. Dos conclusiones: festival ofensivo de Ryan Mathews y Mike Tolbert, y muro defensivo de los hombres de Greg Manusky para dejar a los Vikings sin un mísero punto en toda la segunda mitad del partido.

Hay que destacar la labor de Mathews, porque sólo quien viera el partido sabe lo importante que fue el de Fresno para remontar el choque. Su recepción y posterior carrera de 37 yardas en el tercer cuarto dio ritmo al ataque y metió el miedo en el cuerpo a los Vikings, que veían como los Chargers volvían al campo con fuerza. Otro TD de Tolbert esta vez de 7 yardas por tierra ponía la diferencia con los Vikings en únicamente 3 puntos. Entre Mathews y Tolbert consiguieron más de 200 yardas entre pase y carrera…menudo dúo tenemos en SD!!

A partir de ahí fue cuando se vio la mejor cara de los Chargers. McNabb y Peterson a duras penas lograban primeros downs y Rivers y sus mosqueteros cada vez estaban más tiempo en el terreno de juego. Creo que es justo destacar el trabajo de los linebackers, especialmente de Spikes y Donald Butler, los cuáles jugaban su primer partido como Chargers y del CB Antoine Cason –para mi verdadero MVP del partido, ya que sus tres deflections a pases de McNabb en sendos terceros downs, permitieron a los Chargers remontar el partido–.

Victoria y fiesta en SD

Con 20-17 para los Vikings y la pelota continuamente en manos de Rivers, era cuestión de tiempo que llegaran los puntos de la victoria. Primero un Field Goal por parte del punter, Mike Scifres, igualaba el partido –Mike enhorabuena por tu nuevo contrato, te mereces cada centavo que te llevas al bolsillo, porque vaya cojones tienes!!– y después el tercer TD de Tolbert a pase de Rivers, daban por fin la ventaja a unos Chargers que controlarían el reloj de maravilla cuando volvieron a recuperar el balón, y dejaban a Peterson y sus compañeros con cara de pocos amigos y volviéndose a Minnesota con los bolsillos vacíos.

Lo peor del partido sin duda las lesiones. Castillo podría tener la tibia rota, Kaeding se perderá lo que resta de temporada por una lesión en la rodilla y Tolbert sufrió un golpe, creo que en la rodilla, que le mantendrá casi seguro fuera del terreno de juego contra los Patriots. Es la hora de Ryan Mathews!!

Lo mejor: Antoine Cason. Las estadísticas las puso Tolbert, pero sin Cason los Chargers no hubieran tenido la posibilidad de mover la pelota como lo hicieron. Tres pases defendidos en terceros downs le convierten en la estrella del partido.

Lo peor: Rivers y las lesiones. A ver que me explique…acostumbrados a la excelencia de Rivers, su partido de ayer fue sin duda el peor en bastante tiempo con varios pases importantes completamente fuera del alcance de sus receptores. Eso sí, cero preocupación y que no cunda el pánico, que el capi volverá la semana que viene para asombrar contra Brady y sus chicos.


Os dejo un enlace con un análisis completísimo que hace nuestro amigo Tope de Vikings Spain http://minnesotavikings-spain.blogspot.com/2011/09/cronica-san-diego-chargers-24-17.html